Sivoz México – Contacto a tus clientes
Muchos equipos de cobranza intentan “hacer más”: más llamadas, más mensajes, más horas. Pero los datos recientes muestran otra realidad: el problema no es falta de esfuerzo, es exceso de fricción. Esa fricción aparece como retrabajo, esperas innecesarias, reportes manuales que consumen tiempo y poca visibilidad para decidir en el día.
Cuando esa fricción baja, los resultados suben sin aumentar la carga del equipo.
Lectura operativa: no se trata de empujar más, sino de quitar fricción y decidir mejor cada día.
A) Muchas tareas manuales y repetitivas
Ejemplos: armar reportes en hojas de cálculo, copiar datos entre sistemas, marcar números uno por uno. Eso cansa, quita foco y genera errores.
B) Decisiones con poca información al momento
Si no hay un tablero con indicadores al día, se decide por “lo urgente” en lugar de por lo que más impacta. Los problemas se detectan tarde, cuando ya cerró la semana o el mes.
C) Uso de canales sin reglas
Se envían WhatsApp, SMS, correos y llamadas, pero sin una lógica por segmento: a qué tipo de cliente conviene cada canal, en qué horario y con qué mensaje. Resultado: muchos intentos, poco efecto.
Qué es: el sistema marca por tu equipo y solo transfiere al asesor las llamadas que alguien contestó.
Por qué sirve: elimina tiempos muertos (tonos, buzones y marcación manual). El asesor pasa más tiempo conversando y menos esperando.
Qué se nota: sube el tiempo hablado por hora; con ello, suben las promesas y los pagos.
Qué es: el asesor trabaja con una vista única: datos del cliente, historial, promesas, notas y sugerencias del siguiente paso (qué decir, por qué canal y a qué hora insistir si no contesta).
Por qué sirve: se pierde menos tiempo saltando entre sistemas, hay menos errores y se atiende mejor.
Qué se nota: cerca de 30% más eficiencia en la gestión.
Qué es: cada mañana se ordena la lista para empezar por las cuentas con mayor probabilidad de pagar y se define la acción correcta (canal y horario).
Por qué sirve: evitas insistir donde no hay respuesta y concentras la energía donde sí hay posibilidades.
Qué se nota: sube el contacto efectivo y el porcentaje de promesas cumplidas.
Qué es: establecer, por tipo de cuenta y momento, qué canal usar (WhatsApp/SMS para recordatorios simples; llamada para negociar; correo para documentación) y en qué horario.
Por qué sirve: con menos intentos logras más respuesta.
Qué se nota: mejor tasa de contacto, menos reintentos inútiles.
Qué es: un tablero con indicadores simples, visibles para líderes y asesores, que actualiza durante la jornada.
Por qué sirve: si una campaña se rezaga a las 11:00, puedes mover recursos hoy, no dentro de una semana.
Qué se nota: decisiones más rápidas, mejor enfoque y avances más consistentes.
Contexto: 10 asesores, 20 000 cuentas/mes, mucha mora temprana.
Mes 1: activas marcación inteligente y automatizas recordatorios previos (WhatsApp/SMS/email). El equipo conversa más y con cuentas “calientes”.
Mes 2: publicas reglas claras por tipo de cuenta (monto, antigüedad, comportamiento) y conectas datos básicos para ver el recorrido completo (desde el primer contacto hasta la promesa).
Mes 3: cada mañana generas la lista priorizada y, en la pantalla del asesor, aparece el siguiente paso recomendado. Los objetivos se miden por promesas cumplidas y recuperación, no por “llamadas hechas”.
Efecto habitual: con la misma plantilla, sube el contacto efectivo, suben las promesas cumplidas y baja el retrabajo.
La recuperación mejora cuando baja la fricción. Eso significa:
No es “hacer más”: es hacer mejor con el mismo equipo, menos desgaste y mejores números.
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